Hace casi año y medio el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, con sede en Luxemburgo, falló en contra de España, obligando al país a elevar el IVA de los productos sanitarios, que gozaban de IVA reducido pero que, según la justicia europea, debían estar gravados con el impuesto general, salvo en el caso de los productos y tecnologías sanitarias destinadas a personas con discapacidad.

Tras el Consejo de Ministros del pasado viernes, la vicepresidenta del Gobierno y portavoz del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, ha dicho que el IVA subirá en una cantidad «muy limitada» en productos sanitarios, «en cumplimiento de la normativa europea». La subida sería del 10 actual al 21 por ciento.

Fenin, la patronal de tecnología sanitaria, estima que el 35 por ciento de los productos sanitarios se librarían de esta subida del IVA. Con este cálculo, el sobrecoste para las autonomías rondaría los 500 millones, en lugar de los 1.000 estimados inicialmente, según informa Diario Médico.