El Internet of Things (IoT) está a punto de transformar la forma en que vivimos y trabajamos, y si alcanza su máximo potencial, cambiará fundamentalmente todos los aspectos de nuestras vidas. Según un informe publicado recientemente por Scheneider Electric, se estima que el número de dispositivos conectados crecerá de dos mil millones de objetos en 2006 a 200.000 millones para el año 2020. Ese tipo de disrupción es muy evidente ya ahora en sectores verticales como los edificios, y en concreto en entornos como los hospitales, en los que tener unos sistemas adecuados de gestión es fundamental, para evitar situaciones críticas, pero también para ser más productivos y ahorrar costes.

Se prevé que los dispositivos IoT dedicados al cuidado de la salud (sin incluir dispositivos como rastreadores de fitness) crecerán de 95 millones en 2015 a 646 millones en 2020.

Estos dispositivos están generando un aluvión de datos. Con las herramientas adecuadas, los centros de salud obtendrán información y tomarán medidas basadas en esos datos para tomar mejores decisiones de atención operativa y del paciente.

El Internet of Things en los hospitales permitirá operaciones más eficientes, pacientes más satisfechos e instalaciones sanitarias más seguras. El IoT convierte los datos en decisiones y acciones, al permitir conectar dispositivos, recopilar datos críticos, analizar y reaccionar utilizando la información en tiempo real para mejorar la eficiencia de la instalación.

Los dispositivos IoT y los datos se combinarán para mejorar las operaciones de las instalaciones de atención médica y la misma atención a los pacientes.

Apps que mejorarán la satisfacción del paciente

Para la mayoría de pacientes, estar en el hospital es estresante, frustrante y angustiante, porque se les quita gran parte de su poder de control. Y no tiene por qué ser así. Con una aplicación móvil, los pacientes pueden controlar la temperatura ambiente, la iluminación y las persianas, acceder a portales de entretenimiento o de educación del paciente, pedir sus comidas, llamar a la enfermera. Todo desde la comodidad de su cama de hospital.

Se usará la información de localización de forma más inteligente, para proteger a las personas y sus propiedades

Otra tendencia reciente es el uso de sistemas de localización en tiempo real (RTLS). Al utilizar RTLS, las instalaciones médicas pueden hacer un seguimiento del equipo, los pacientes y el personal para lograr objetivos como prevenir robos, ahorrar en tiempo de búsqueda de los equipos y, por lo tanto, aumentar el tiempo dedicado a los pacientes, y comprender los patrones de flujo y ocupación del paciente.

Uso de análisis predictivos para ahorrar dinero

Las empresas a menudo reducen costes a través de la reducción del personal y el servicio. Pero en un centro de atención médica, esto puede amenazar algo tan crítico como la calidad de la atención al paciente. Por lo tanto, es mejor centrarse en ser más eficientes energéticamente y operativamente.

En definitiva, el IoT comunica los sistemas operativos con los sistemas de información (centros de datos, redes), identificando oportunidades para mejorar la eficiencia operativa, la satisfacción del paciente y la seguridad.

También es interesante el potencial del mantenimiento predictivo con IoT en hospitales. Al usar sensores en dispositivos conectados para detectar un uso anormal monitorizando los perfiles de carga, se pueden identificar los primeros indicios de determinados problemas, pudiendo adelantar una solución. Destacar que sumado a la reducción de los costes derivados del consumo eléctrico y mejora en el mantenimiento de los equipos, la supervisión de la calidad y la cantidad de energía mediante IoT ofrece otras ventajas como son aplicar analíticas.

Hacer frente a los retos energéticos en edificios como los hospitales, en los que el confort de sus ocupantes es fundamental, es una necesidad reconocida por el sector. También se hace necesario un ahorro energético. Pero sólo se puede controlar lo que se puede medir, y esta es la gran transformación del IoT.